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Tuxtla Gutiérrez.- Desde las primeras horas de ayer viernes, el gobierno de Guatemala abrió su frontera con México, luego de que el pasado 17 de marzo cerró por el nuevo coronavirus.
Luego de la apertura, los vehículos ingresaron a este país para realizar compras, en Talisman, otra de las vías para entrar, sucedió lo mismo, mientras que las autoridades mexicanas fumigaban estos carros.
Aunque el comercio nunca se interrumpió porque en el río Suchiate, paso informal, siguió el trasiego de mercancía, aunque en menor medida porque por el impacto económico, los balseros dejaron de laborar solo un mes, del 17 de marzo al 14 de abril, dijo uno de ellos.
Por su parte, autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM), aplicaron gel antibacterial y pedían tomar distancias a quienes ingresaban.
En cuanto al paso de migrantes, a finales de mayo, trabajadores del Albergue Belén de Tapachula reportaron que disminuyó el flujo. A las 8:00 de la mañana se retiró la Policía Nacional Civil, y las brigadas del Ministerio de Salud que habían estado durante el cierre de esta frontera.
Horas después, se informó que el presidente de Guatemala Alejandro Giammattei, dio positivo a la COVID-19, dijo que seguirá trabajando por videoconferencias, aislado del resto de su equipo.
